martes, 20 de diciembre de 2011

los 12 Sonidos

Aqui les dejo otro que me dejo los pelos de Punta la verdad...




Corría el año de 2005, recién había obtenido suficiente dinero como para poder pagar una buena conexión de Internet. Estaba muy emocionado debido a la cantidad de música y videos que podía obtener. Esa tarde me la pase bajando juegos y música, pero ya llegada la noche mis intereses se volvieron más obscuros…. Grave error.
Buscando ente diversos programas psicofonías y relatos de terror me topé con un archivo bastante peculiar llamado “Rec06.mp3” y decidí bajarlo debido a la interesante etiqueta que tenía debajo, en la descripción del archivo rezaba la siguiente oración: “Este es parte de los 12 sonidos del archivo original de Odeo Takashima, si tienes alguno de los otros 11 no dudes en contactarme”. -¿Los 12 sonidos?- pensé. –Suena a algo bastante interesante como para entretenerme un rato-.
Al reproducir el archivo escuche lo que podría definir como una especie de ronquido o gruñido de algún ser vivo, como una respiración bastante dificultosa de un ser que agoniza, acompañado de ciertos toques macabros que me erizaron todos los vellos del cuerpo.
Pensé en abandonar mi búsqueda cuando vi que el archivo no se había descargado solo, este estaba acompañado con una advertencia en formato .txt que abrí casi inmediatamente. Dicha advertencia me dejo bastante intranquilo y lleno de inseguridad. “Ahora que has reproducido uno de los 12 sonidos prepárate para lo peor, dice la leyenda que si no reproduces el archivo Rec08.mp3 después de escuchar alguno de los otros 11 tu vida se volverá un infierno. La leyenda es cierta y te confesare que he disfrutado mi ultima hora de vida.”.
¿Que podía pensar en ese momento?… ¿Es acaso una broma de muy mal gusto?, ¿Un tipo sin nada mejor que hacer con una conexión a Internet muy rápida? Mi tercera idea no llego debido a que ruidos muy extraños comenzaron a hacerse notar.
Fuera de mi ventana había un pasillo muy poco iluminado y en esa maldita noche en especial se veía más tétrico que de costumbre. Juro que había siluetas muy extrañas fuera, como si hubieran escuchado ese sonido y hubieran acudido a su llamado infernal. Comencé como loco a buscar el archivo Rec08.mp3 en el mismo servidor donde estaba alojado el original que descargue. Para mi sorpresa el usuario que lo había subido dejó de hacer actualizaciones en 2003 adivinen por que?…. Había muerto.
Creí que era una broma muy pesada y que se había salido de lo que yo podía tolerar, cuando intente apagar mi PC todo enojado un mensaje de la misma computadora me lleno de terror: “El Archivo Rec06.mp3 no puede cerrarse”. El sonido empezó a reproducirse de nuevo y trate de apagar las bocinas sin éxito. Los ruidos afuera comenzaron a hacerse más cercanos y comencé a distinguir voces y murmullos. Era tanto mi miedo que no me atrevía a mirar fuera. Las luces de mi habitación comenzaron a fallar y sin embargo la PC no se apagaba. Ese maldito sonido parecía acrecentar su volumen conforme pasaban esos segundos eternos en los que no tenia idea de que hacer. Comencé a rezar en todos los idiomas que se me ocurrieron y me encomendé a todo lo bueno que conocía. Mi PC empezó a funcionar de nuevo y busque desesperadamente dicho archivo.
Encontré varias copias falsas del Rec08.mp3 que solo aumentaron mi frustración y mi miedo ante lo que estaba fuera de mi habitación. Pasadas casi dos horas empezó a llegar hasta mí un olor nauseabundo similar al de carne y sangre en estado de putrefacción, sentía que las cosas iban a ponerse peor. Quise salir a enfrentar a lo que sea que estuviese ahí, pero para mi sorpresa la cerradura se había trabado y fuera solo veía luces siniestras danzando como si compitieran por ver cual me asustaba más. Estando lejos de mi PC, y casi al borde de la locura empecé a escuchar un sonido muy extraño… como si una niña se lamentara por algo y esto le causara mucho dolor.
Los sonidos extraños fuera cesaron y esas luces macabras dejaron de danzar. El llanto de la niña las había ahuyentado y note para mi sorpresa que el archivo estaba activo en mi reproductor de audio… Estaba entre esos Rec08.mp3 que había encontrado. Aun intranquilo noté que todo funcionaba como antes y que ya no había nada fuera. Alegre y menos preocupado apague mi PC, pero decidí no borrar ninguno de esos 12 archivos que encontré esa maldita noche… Debe haber alguien que desee experimentar esa horrible sensación. Abajo encontraran el link de descarga de Rec06.mp3, es parte de los 12 sonidos del archivo original de Odeo Takashima, si quieren alguno de los otros 11 no duden en contactarme” Felices pesadillas.
http://www.4shared.com/audio/65GJJNrQ/Rec_06.html
Para los que se pregunten quién fue Odeo Takashima. Este chico en 2002 fue de los primeros japoneses en obtener un reproductor de Mp3. Lamentablemente cuando estaba estrenándolo de camino a su hogar falleció en un accidente de tránsito que lo asesino de un modo lento y doloroso. Cuando subió al bus que lo llevaría hasta su hogar comenzó alegremente a grabar el recorrido para después escucharlo. Mientras hacia esto un conductor impertinente golpeo con un camión de construcción repleto de varillas de acero la parte lateral derecha del bus. Una varilla de acero de 10 metros le atravesó el cráneo de lado a lado mientras otras 6 se incrustaron en su cuerpo. El reproductor de Mp3 quedó intacto pero cuando un forense curioso lo conecto a una PC descubrió que dentro no había un archivo de grabación sino 12 archivos que se dice juntos forman un archivo de audio en el que se puede escuchar el momento en que el autobús es impactado por el camión de construcción, los gritos de agonía de Odeo y de las otras 17 personas que murieron esa tarde de Marzo. ¿Realmente deseas escuchar esto?

lo que acecha en los campos

Hola! disculpen no haber subido mas, he estado ocupado aquí les dejo otro Muy bueno.


Fue solo hace algunas semanas que los bultos de paja empezaban a alejarse de la casa. Cada mañana cuando despertaba, cada bulto se movía algunos metros del lugar donde se encontraban. Asumía que eran bromistas con cierta capacidad intelectual y metodos de diversion limitados, así que lo ignore. En pocos días, los bultos empezaban a alejarse hacia los límites de la granja. Estaba fastidiado del jueguito para ese entonces y decidí colocarlos en su lugar. Me tomó una tediosa hora ponerlos de nuevo en su lugar, cerca de la casa, y para ese entonces estaba listo para romperle el cuello a cualquier idiota que decidiera infortunarme de tal manera.

A la mañana siguiente, encontré a todos mis caballos decapitados… El olor fue lo que me despertó. Cada uno de ellos acostado de lado dentro su establo. No había señales de las cabezas. Pasé el resto del día limpiando el desastre y enterrando los restos. Fue entonces, cuando noté que los bultos de paja habían regresado a sus posiciones del día anterior, esparcidos a los lejos, en los campos. Esta vez, los dejé en donde los encontré, resignado, sin darles mayor importancia a ellos sino a mis caballos. Sin duda, quien lo habia echo debía pagar por tal aberracion.

Esa noche, me senté en el porche con mi escopeta en mano, y una taza de café en la tabla a mi lado. Me senté por horas, fijando mis ojos en el campo para tratar de encontrar al tipo que movía mis bultos de paja. Finalmente, empecé a quedarme dormido… Y me hubiese quedado dormido, a no ser porque en el momento en que mis ojos empezaban a cerrarse, escuche a los arboles del bosque cercano agitarse y estremecerse. Me levanté, con el corazón latiendo fuertemente; Caminé, con mi escopeta al frente. Tenia que atrapar al bastardo. Esperé ansiosamente por cualquier persona que se acercara lo suficiente para sorprenderme o para yo sorprenderlo a él.

Fue entonces cuando algo se me acercó lo suficiente para poder yo distinguir su silueta en la oscuridad. La cosa que asechaba en los bosques cercanos a mi granja, parecía no notar que yo estaba sentado cerca. Parecía acechar, encorvada con la postura de un ladrón de carteras. De no ser porque, aun encorvada, tenía unos 4 metros de alto, parecería frágil. Los delgados brazos y piernas, y su pecho emancipado, me recordaban a un animal muriendo de hambre. Sin embargo, esta cosa era increíblemente fuerte, pues vi como cargaba un bulto de paja bajo cada uno de sus brazos con facilidad, y lo acomodaba con cuidado a lo lejos. La observe trabajar, moviendo cada uno de los bultos con cuidado. De vez en cuando se desencordaba para buscar por más bultos en el campo, antes de ajustar el bulto en el que trabajaba.

Antes de que decidiera retirarme, noteé que miraba a mi casa. Sentí sus ojos barrerme en la oscuridad, pero no estoy seguro de que me haya visto. Entonces, esa cosa giró sigilosamente y regresó por donde vino, a la oscuridad de los bosques. Me tomó una hora antes de recuperar el valor para osar mover apenas un músculo nuevamente. Me metí a mi casa despues de un tiempo, pero no dormí en esa noche. Fue solo hasta que el sol salió, que me atreví a poner un pie fuera de mi porche hacia los campos. Los bultos de paja estaban donde los había dejado, esa cosa. Sin embargo, noté que esta vez no los había movido tan lejos como las noches anteriores; Parecían marcar una especie de línea. Y mientras caminaba alrededor de la casa, vi que formaban un distintivo círculo alrededor de mi casa, conmigo en el centro. Me di cuenta que los bultos estaban formando una especie de frontera, como si esa cosa estuviera enviándome un mensaje. Pude dormir un poco esa noche, y solo porque estaba agotado.

La siguiente mañana, no hubo movimiento de los bultos. No se movieron para nada por el resto de la semana, de hecho. Estaban finalmente donde esa cosa quería que estuvieran. Enfermé tratando de interpretarlos. ¿Por qué esa cosa habría invertido tanta energía moviendo bultos de paja, y amenazarme con tanta violencia en caso de que yo interfiriera? Asesinar mis caballos fue solo eso: una amenaza. Una amenaza inteligente. Sabía que me asustaría, y sabía que entendería las implicaciones. El sonido de un automóvil trabajando cerca del camino a mi granja, un mañana, me dió un golpe de emoción. Planeaba abandonar la granja desde que ví a la cosa, pero no podía irme a pie sin arriesgar a que me hiciera lo que le hizo a mis caballos. Pero, si podía llegar al automóvil que se aproximaba, lo pararía sin importarme quien fuera, así tuviera que asaltarlos.
No tuve la oportunidad.

El carro avanzo lentamente por el camino. Le hice señales para que se apurara. Fue cuando pasó entre dos de los bultos de paja que estaban colocados en cada lado del camino, que escuché un estruendo en los bosques. La cosa salió de repente de entre los árboles corriendo en sus cuatro flácidos y terribles miembros hacia el automóvil. En solo instantes, se lanzó al auto como un felino depredador; en segundos, estaba pelando la carrocería de metal del auto, tratando de llegar al conductor. El hombre, quien haya sido, gritaba, mientras yo solo podía escuchar el crujido del metal y el romperse de lo vidrios. Fue entonces que la cosa lo aplasto en su mano, cuando dejó de gritar el hombre. Lo aventó, y se desencorvó para mirarme nuevamente.

A plena luz del sol, pude ver la falta de humanidad en ella. Estaba compuesta de algo asqueroso, terrible y… vivo, lo cual estaba pegado formando una burla del semblante humano.

La cosa se regresó a los bosques, y yo me no logré moverme, habia presenciado algo que no pensaba hasta hace poco poder repetir, no podía quitar mis ojos del lugar donde mis esperanzas sucumbieron. Mi ojos miraban a donde se encontraba el auto, con la maquina todavía trabajando, entre los dos bultos de paja. De repente, entendí. El mensaje era claro. Soy el prisionero de esta cosa. Y no se me permiten visitas. Nada podrá cruzar las fronteras que me impuso. Estoy atrapado aquí, por lo que acecha en los campos. Y no me pide nada excepto, que no puedo marcharme de aquí. Es su capricho, yo soy lo que quiere. Aun así, no creo soportar ser el canario de esa cosa.

He pensado mucho en los últimos días, desde que ví como aplastaba a ese hombre. Si cruzo la frontera de bultos de paja, probablemente me hará lo mismo; Aplastará mi cráneo antes de que pueda poner mis manos para protegerme… Después encontrara una nueva mascota que pueda quedarse quieta sabiendo que esa cosa está esperando afuera, observándola con esos grandes y brillantes ojos pero yo no puedo.
He estado pensando en los últimos días y… voy a intentar escapar


Fuente: <a href="http://creepypastas.com/lo-acecha-en-los-campos.html">Lo que acecha en los campos</a>



martes, 6 de diciembre de 2011

la despedida

Uno hecho por mi, Que lo disfruten!

Mi abuelo y yo no entablábamos una buena relación, no hablábamos mucho y en realidad no nos teníamos mucho afecto pues la adoración de sus ojos era mi hermana menor Antia, y eso en realidad me daba igual.

Antia es deportista así que durante la semana de vacaciones de Navidad Se fue a un campamento de gimnasia y mis padres fueron de viajes de negocios y yo me quede en mi casa solo ya que tengo 16 y mis padres ya me tienen cierta confianza. Una tarde sentado en mi computador escuchando música y chateando con mis amigos, oigo el timbre sonar y me pareció raro ya que ningún familiar sabia que estaba solo en casa.

Para mi sorpresa era mi abuelo, quien nunca imagine que vendría pues sabia que esta semana mi hermana se iría:

-Hola abuelo

-Hola Hijo mio - Me contesto con una cálida sonrisa y un afectuoso abrazo

-Hmm Abuelo Antia se a ido pensé que ya lo sabias

-¡Oh! Si lo se lo se muchacho, vengo a pasar un buen rato contigo nada mas

Por un momento pensé que esa seria la peor tarde del mundo, pero no puedo decir con orgullo que fue una de los mejores momentos de mi vida nunca me imagine que mi abuelo y yo tuviéramos tantas cosas en común, cayo la noche y mi abuelo se despidió con un abrazo largo y caluroso y con una lagrima en los ojos me dijo:

-Hijo mio espero que sepas que te quiero mucho, y que así sea nuestro ultimo momento las cosas podemos cambiarlas, yo las cambie al venir aquí y demostrarte el amor que no te he demostrado en mucho tiempo... Te quiero - y se fue tranquilo hacia su casa

A la mañana siguiente desperté tranquilo me senté en la mesa del comedor y escucho como se abre estrepitosamente la puerta de mi casa asustado corro a ver y veo que son mis padres junto con mi hermana con cara de preocupados, mama parecía haber llorado mil horas al igual que mi hermana, y papa con una cara de tristeza inmensa...

-Que les ha pasado?¡
-Lo sentimos tanto hijo, te dejamos solo debiste haber estado asustado por tu abuelo! - dijo mi madre con voz triste y ronca

-Mi abuelo? El y yo pasamos una tarde muy feliz ayer, me agradan sus gustos son iguales a los míos...

-Pero de que hablas? Tu abuelo murió ayer por la mañana....

Fueron las palabras que dijo mi padre y segundos después me desmaye... Mi abuelo fue a mi casa las 3 de la tarde, en punto.